...de la revolución, ¿Cerca o Lejos?

El escritor de Mindenkié

Sultano

undefined visitas
...de la revolución, ¿Cerca o Lejos?

Algunas gentes piensan que las gentes se están despertando. Los movimientos están reorganizándose, quien se organice primero hará la contrarrevolución.

No pasaron más de 12 días y ya el país está en llamas. El anarcocapitalismo está naciendo pero mezclado con políticas liberales. Es algo muy loco porque la sociedad está en las calles, quizá un poco cansada por toda la situación que tuvo que pasar en los últimos años. Muchos votantes de la alianza LLA+PRO están arrepentidos, así como otros decepcionados. No podemos negar que las nuevas políticas que quieren aplicarse hacen cambiar el panorama económico hacia otro abismo.

¿Nuestra sociedad está preparada para todo esto?

Es una transformación del panorama político argentino, no podemos negarlo aunque hay cuestiones a nivel macro que no se ven a simple vista por las acciones, pero el fin será:

  • El anarcocapitalismo que se quiere aplicar, va a convertir al país en uno sin estado en lo más mínimo. ¿Queremos ser una neocolonia o un país en serio?

  • Se van a transformar las empresas dentro de un paradigma más libre para los empresarios y menos libre para los empleados. El liberalismo va a aplicar su flexibilización.

Esto viene a traer un nuevo panorama para el país, dejando de lado a los socios habituales como China o Brasil para transformarse en un país diferente. ¿Para ser neocolonia?

No es casualidad que todos los estratos de la sociedad se estén movilizando de esta manera.

Algunos dicen ¿por qué no salieron antes?

otros

¿Por qué quieren vender todo?

La sociedad está totalmente impactada por la revolución anarcocapitalista que se está intentando hacer desde el estado mismo. Se anunciaron desgracias desde el primer día sin decirle a la gente que espere al segundo semestre o que vamos a repuntar. ¿Por qué cambiar el sistema mismo y no mejorarlo?

La gente decidió y el país cambió de paradigma. Espero que nos vaya bien, pero como siempre en nuestro país, cada vez que empieza a funcionar algo, siempre alguien pierde.

Excepto cuando gobiernan los que promueven el estado de bienestar.